Así parece desprenderse de un estudio realizado por Zurich mediante encuestas a 800 autónomos y micropymes, que indica que cada vez hay más emprendedoras en España y la brecha de género se reduce en este ámbito, pues perciben poca discriminación y se muestran más satisfechas por ser dueñas de su autonomía y poder conciliar.
Por Mercedes García de Vinuesa, directora de la Fundación Somos Naturaleza
La realidad es que las mujeres perciben cada vez más el emprendimiento como una oportunidad para desarrollar su carrera profesional, sin tener que enfrentarse a los roles y prejuicios que están arraigados en otros contextos laborales. A este respecto, no se sienten discriminadas por su género a la hora de emprender, pues únicamente un 13% de las emprendedoras siente que ha tenido las cosas más difíciles por el hecho de ser mujer.
En este sentido, las barreras que perciben las mujeres a la hora de emprender (como el alto nivel de estrés y de trabajo, las dificultades financieras iniciales o las trabas burocráticas) son muy similares, o incluso menores, en algunos casos a las que señalan los hombres.
Destacan en especial la mayor libertad que tienen para desarrollar su creatividad, la satisfacción que supone trabajar para ellas mismas y las facilidades para poder conciliar su vida personal y profesional. Además, las emprendedoras sobresalen por un nivel de compromiso más elevado, tanto con su trabajo como a la hora de motivar y cuidar a sus empleados o proteger el medioambiente.
Las principales razones que llevan a las mujeres a emprender son la pérdida de trabajo o la dificultad para encontrar un empleo (23%), la posibilidad de tener más autonomía (23%), así como la conciliación entre la vida personal y familiar (11%).
No podemos olvidar que la mayoría de los trabajos domésticos y de cuidados que se desarrollan en los hogares han sido, y siguen siendo a día de hoy, realizados principalmente por mujeres de forma invisibilizada y no remunerada.
El que existan cada vez más mujeres que se lancen a emprender con éxito, convirtiéndose en sus propias jefas, es importante para visibilizar la capacidad de dirección, de innovación y desarrollo de éstas.
Analizando las cifras numéricas podemos constatar que todavía queda mucho por hacer para que el 50% de la población representado por las mujeres, ocupe los puestos que les corresponde por su valía y méritos.
- Solo 5 mujeres lideran empresas que cotizan en el Ibex y además, dos de ellas han heredado el puesto.
- Solo 8 de las 42 audiencias provinciales están presididas por mujeres (aunque representan el 54,85% del total de jueces y magistrados en activo en España)
- Solo el 14% de los puestos ejecutivos de los bancos en España están ocupados por mujeres, cuando el 51,2% de las que trabajan en banca son mujeres.
- Solo el 25% son catedráticas y el 23% rectoras, cuando el 56% de las estudiantes universitarias son mujeres.
- Solo 2 de los diez hospitales más reputados de España tienen una mujer al frente, cuando el 51,5% de los médicos colegiados son mujeres.